La violación de derechos humanos en la Unison, una realidad: STAUS

José Luis Jara

La violación a los derechos humanos de los universitarios es una realidad.
Prácticamente ocurre en todos los sectores de la Universidad de Sonora, pero sobre todo, este problema se manifiesta con mayor incidencia en la División de Ciencias Sociales, en las unidades foráneas y en los trabajadores de confianza
El secretario general del Sindicato de Trabajadores Académicos de la Unison dijo que existe un diagnóstico sobre este problema en la casa de estudios.
Sergio Barraza, físico con grado de doctor por una universidad extranjera, habló sobre el punto:
“Es un muestreo sobre este problema. Los resultados que arrojó es que efectivamente hay áreas donde el problema es mayor” Se manifiesta desde faltas de respeto, no dan derecho a audiencia y no se benefician con prestaciones que dependen de la firma del jefe.
-¿Y en qué sectores de la Universidad se presenta?
-Por ejemplo, en la División de Ciencias Sociales, en las unidades foráneas, algunos sectores de estudiantes, el personal de confianza, que se encuentra muy desprotegido y víctima de muchos abusos, en diferentes instancias de poder.
-¿Con los maestros, cómo se presenta el problema?
-Se presenta en sectores localizados, como son los maestros de horas sueltas que son víctimas de prepotencias de las autoridades que manejan las convocatorias para ocupar plazas de maestros.
-¿Y cómo se dan los casos?
-Al interior de la Universidad tenemos casos importantes de no acatamiento de la legislación universitaria, los acuerdos y el no respeto de los derechos humanos de los universitarios. Muchas veces no se manifiestan por falta de conocimiento o por falta de instancias donde presentar una queja y en otras por temor.
-¿Cómo…?
-No respetan el derecho de petición, de audiencia, de ser respetado en base a los derechos humanos. Cuando se presente un caso de acoso, no hay instancias
-¿Hay sectores vulnerables?
-Sí. En la Universidad se presenta este problema, donde los sectores más vulnerables se presentan los tres sectores de la comunidad: maestros, trabajadores y estudiantes. En el caso de los maestros, los de horas sueltas son los más vulnerables porque se encuentran en desventaja cada semestre en las programaciones de las materias. La dependencia de un concurso que esta en manos de las autoridades, los pone en desventaja y los hace más vulnerables.
Pero los agravios se presentan hasta con los maestros de tiempo completo. No se les atiende su problemática, no lo apoyan y lo tratan de dejar aislado si no se alinea con las autoridades.
Sin embargo, las autoridades universitarias acaban de designar al Ombudsman de la casa de estudios. Ese nombramiento recayó en el maestro de la escuela de Ciencias de la Comunicación, Manuel Tapia Fonllem.
Ante ello, Sergio Barraza dijo:
-Como sindicato y por acuerdo de los diferentes órganos de gobierno del STAUS, hemos decidido no reconocer esa decisión. No la vamos a reconocer ni la vamos a legitimar.
-¿Y…?
-Ya se lanzó una convocatoria para elegir un Ombudsman alterno. Es un grupo de maestros, trabajadores y estudiantes que convocó desde el 3 de octubre a la comunidad universitaria para elegir al defensor de los derechos humanos de los universitarios.
La convocatoria salió el pasado 3 de octubre y establece que el 23 de octubre cerrarán el proceso de registro de aspirantes. Del 23 de octubre al 10 de noviembre se revisarán los expedientes de cada uno, sus propuestas y para el 11 de noviembre se van a dar a conocer los nombres de quienes cumplan con los requisitos. Y el 12 de noviembre se realizará la elección en base al voto universal y secreto, donde podrán participar todos los universitarios, en urnas que se instalarán en todas las unidades.
-¿Y al Ombudsman que nombró la autoridad?
-Como sindicato no lo vamos a reconocer porque no se respetaron los estatutos de la comisión que convocó a la elección. En esa comisión no se respetó el derecho de los tres sectores de la universidad para participar en el proceso de elección. Y nos parece muy paradójico que no se respeten los acuerdos para nombrar a la persona que se debe distinguir por combatir esos problemas.
-¿Fue una simulación esa elección?
-Hay falta de sensibilidad en las autoridades, por esa posición que han mantenido de no respetar los acuerdos, de no abrirse al diálogo con todos los sectores y no propiciar un proceso claro para elegir a esa comisión, donde todos salgamos convencidos en la elección que resulte.
-¿Hay algún acuerdo fundamental que se violó?
-El acuerdo era que saliera una comisión autónoma, realmente independiente, como garantía fundamental para cumplir con su función de salvaguardar los derechos humanos de los universitarios.
-¿Tendrán mucho que ocultar las autoridades?
-Claro. Aunque se podría especular mucho, lo que se observó es que las autoridades quieren tener el control sobre este organismo. Pero eso se debe al desconocimiento y a un temor infundado en el papel del Ombudsman.
-¿Por qué?
-Temor infundado por el desconocimiento del problema y porque finalmente lo que se pretende es que haya armonía entre todos los sectores de la universidad.